"Para diseñar carriles bici no hace falta ser un experto, basta que te imagines a un niño de tu familia, un niño que quieras mucho, usando con su bici ese carril. Si te sientes confortablemente seguro con esa idea es que es un buen carril bici"
El vídeo muestra el diseño e impacto de vias ciclables en Vancouver. Para tomar nota.
Ni más ni menos. Eso deberían pensar los que diseñan la movilidad en las ciudades.
Un diseño muy distinto al que estamos acostumbrados en Barcelona donde los carriles bici están diseñados para que todo el mundo se los tome a broma. Para muestra un botón. En la foto vemos como los motoristas usan el carril bici para avanzar a los coches al mismo tiempo que una camioneta lo usa para descargar tranquilamente. ¡Pero eso no es todo amigos! Lo mejor no se ve en la foto. La furgoneta esta descargando delante de la delegación de la agencia tributaria de la plaza Letamendi. Bueno, no sólo "delante" sino "para"... ¡La furgoneta es de la Administración Pública!. Un gran ejemplo de como las administraciones públicas de nuestro país se toman a rechifla lo de la movilidad sostenible, las políticas de Medio Ambiente en general y las vias ciclistas en particular. Grande.
Todos sabemos que el tema de los carriles bici y de los servicios públicos de alquiler no ha sido más que un método más para subcontratar y fomentar el amiguismo con más espíritu de marketing político que verdadera funcionalidad.
ResponderEliminarCuando una sociedad apuesta por la sostenibilidad no solo ha de hacerlo desde la infraestructuras sino retroalimentarlo desde la educación cívica y la pacificación circulatoria. Necesitamos más mirar por los demás y menos por nosotros; si no es así seguiremos teniendo furgonetas en el carril y ciclistas con auriculares y sin cuidado por las normas circulatorias.
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Completamente de acuerdo. Es verdad que es una cuestión de conciencia cívica. De que vivimos en un espacio compartido. Pero también es cierto que el diseño facilita que tengamos inclinación a convivir mejor o peor. Segun. En el metro de Barcelona, por ejemplo, se reúnen diversos diseños de asientos para pasajeros. En los que el diseño expresa claramente cuantas plazas hay en cada banco, no hay problemas. Los bancos lisos, en cambio, fomentan que el caradura se esparrame ocupando dos plazas un solo individuo. Es solo un ejemplo. Tienes razón. Pero las infraestructuras ciclistas bien hechas ayudan a mejorar la convivencia y la seguridad de los usuarios. Buenos pedales Juan. Me encanta compartir este espacio para tener en cuenta todos los extremos. Con la finalidad, que seguro compartimos, de potenciar el uso de la bicicleta. ¡Gracias por colaborar conmigo!
ResponderEliminarEl diseño de la ciudad 90% es sentido común y el 10 restante es tecnología. En México hemos crecido con una cultura para movernos en automóvil, pero eso está cambiando. Poco a poco comenzamos a volver la vista a aquella estructura social que soportó las colonias que hoy son la base de toda la Ciudad de México. La bicicleta apenas comienza a mirarse por todos con buenos ojos y no como una forma de transporte para quienes no tienen para comprarse un coche.
ResponderEliminarQueda tanto por hacer y tan poca voluntad administrativa por llevarlo a cabo. Vamos avanzando, pero es como llevar un plato de 56 en una pendiente al 20%...
ResponderEliminarSaludos